viernes, 13 de febrero de 2009


Picante. Emiliano Mulieri, de Benetton Treviso, le pegó durísimo a la idea de la Federación tana de sumar cuatro equipos a la Magners League para mejorar el nivel. “Acá hicieron la pirámide al revés. Integran el Seis Naciones, juegan la Heineken, pero no tienen la base”,
El marplatense, ex Belgrano Athletic, ya tiene 34 años sobre su espalda, y está cansado de muchos manejos que se están dando en el rugby italiano. Claro, del tema conoce mucho: estuvo cinco años en el Calvisano y, hace tres temporadas, se desempeña en el Benetton Treviso, junto a los también argentinos Diego Vidal, Franco Sbaraglini, Pedro Di Santo, Augusto Allori y el recién llegado Ariel Hevia.

Las primeras palabras de Mulieri, obviamente, fueron referidas a la Copa: “La idea de este torneo es que los chicos que no juegan tan seguido tengan ruedo para que vayan agarrando más experiencia. Haciendo esto, podemos ampliar la cantidad de jugadores de cara al Super 10”, cuenta el back.

¿La Copa y el Super 10 tienen algo que ver? ¿O la importancia es distinta?

Sí, tiene que ver, porque si ganás en la Copa, tomás confianza. Además, en lo personal, y si se puede, quiero ganar el trofeo.

Algunos piensan que lo ideal, mientras se juega el Seis Naciones, es sólo entrenar…

No podés estar parado dos meses. Lo jugadores que actúan en el Seis Naciones, cuando vuelven, continúan jugando en sus respectivos equipos. Si ellos lo hacen, ¿por qué no podemos nosotros? Obviamente, para muchos rugbiers, no es la misma motivación la que se genera cuando disputás el Super 10 y la Copa. Pero, como te dije, no se puede parar dos meses sólo porque se está jugando el Seis Naciones. Sino, cuando el torneo se reanuda, sentís que llegaste de una pretemporada; es como si fuera otro certamen diferente. La verdad, en lo personal, prefiero jugar la Copa a sólo dedicarme a entrenar.

Pero a los equipos chicos les cuesta más jugar los dos certámenes…

Claro, ahí a ellos se les complica porque no cuentan con tanto recambio. Se les hace pesado disputar las dos competencias con los mismos jugadores, pero también creo que no pueden estar parados dos meses; hay que encontrar un equilibrio.

La Federación de Italia, en diciembre pasado, pidió el ingreso de cuatro equipos a la Magners League, ¿qué opinás de eso?

Yo no lo veo, y más con las reglas que quieren imponer. Por un lado dicen que es para que los jugadores italianos puedan crecer, pero por el otro te ponen un montón de restricciones. Está todo muy mezclado, porque le apuntan a que el campeón del Super 10 juegue la Magners League, pero ¿qué pasa si ese equipo la disputa y, después, desciende? ¿Qué juega después? ¿Le tiene que dar todos sus jugadores al equipo que salió campeón de nuestro torneo? La verdad, no lo entiendo.

También se habló de llevar a los mejores jugadores de las distintas regiones de Italia…

No creo que sea factible. La solución del rugby de Italia no es jugar la Magners League. Siempre pongo el ejemplo de los Pumas. ¿Cómo hicieron ellos para salir terceros teniendo en cuenta que el rugby en Argentina es amateur? Lo consiguieron cuando sus jugadores comenzaron a actuar en equipos internacionales; y en Italia casi todos juegan en Francia e Inglaterra. ¿Entonces? ¿Hay que irse a disputar un torneo con reglas poco claras para levantar el nivel? Sinceramente, no lo veo así.

Planteado así, es difícil de entender…

Es que al único que mejoraría esta mentira es al seleccionado italiano y no al rugby italiano. Si querés mejorar el deporte en este país, tenés que empezar de cero. Y como acá nadie quiere renunciar a nada… se complica. Yo siempre digo que en Italia hicieron la pirámide al revés. Integran el Seis Naciones, juegan la Heineken, pero no tienen la base.

Esta idea se disparó luego de que la Azzurra perdiera en los Tests de noviembre, ¿no?

Claro, y no los perdieron, sino que hicieron papalones. Pero yo te pregunto, ¿cuántos jugadores de esos juegan en Italia? La respuesta es tres, porque los demás se desempeñan afuera, en los mejores torneos del mundo. ¿Entonces de qué me hablan cuando me dicen que hay que jugar la Magners League para mejorar el nivel? El problema acá es otro, no es ese. Si hablan de armar un campeonato más competitivo en Italia, sólo por el placer de que sea así, es una cosa. Pero que no vengan a decir que el problema del seleccionado es el Super 10. Lo que proponen es totalmente contradictorio. Es como que es una excusa; Italia es el rugby de las excusas.

Decís que son excusas, ¿cuál es la realidad?

No lo sé; quizás se trate de un tema cultural. No sé. Quizás deberían bajar la cabeza, arremangarse y jugar un poquito más con el corazón, en lugar de pensar en la platita de la Magners League. Y, sino, que vayan a hablar con alguien en la Argentina, que seguro los va a orientar mejor.

Claro, sincero, reflexivo y con un punto de vista para nada discutible. El argentino Emiliano Mulieri abrió el fuego en Italia y, seguramente, las respuesta no tardarán en llegar.

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