Los All Blacks de la década de 1960 y los Springboks campeones del mundo en 1995 podrían ver terminado su récord de victorias consecutivas por un país que apenas conocen la mayoría de los aficionados al rugby: Lituania.
Si la nación báltica vence a Serbia el sábado en Belgrado será su victoria número 18 de forma consecutiva, un notable logro para un equipo semiprofesional.
"Estamos esperando el partido, pero no, no es una gran noticia en Lituania", dijo el viernes a Reuters en una entrevista telefónica el capitán Mindaugas Misevicius.
"Unas cuantas personas están al tanto, pero los medios de comunicación (del país) siguen principalmente al baloncesto (...) Si ganamos el sábado, tal vez un poco más de gente sabrá de lo nuestro, pero no será fácil", agregó.
Lituania ya podría haber logrado el récord, pero su partido ante Suiza de la semana pasada se pospuso debido a los problemas de viajes relacionados con la erupción de un volcán en Islandia.
Lituania, que ya ha escalado al lugar 37 en el ranking mundial de la International Rugby Board, fue derrotado por última vez en mayo de 2006, cuando perdió 22-0 ante Eslovenia.
Mundial
Sin embargo, incluso esta impresionante racha de victorias podría verse ensombrecida si el equipo no clasifica al Mundial de 2011, algo perfectamente posible.
Para estar en el evento, primero necesita ganar una eliminatoria el próximo mes ante Ucrania. La victoria los hará jugar un más difícil repechaje de ida y vuelta ante Rumania, seguido de una segunda fase intercontinental para determinar la clasificación final al torneo en Nueva Zelanda.
"Ucrania ha ascendido a la primera división europea (...), por lo que tienen algunos buenos jugadores", dijo el medio scrum Misevicius.
"Pero podemos ganarles y luego ¿por qué no la Copa del Mundo?, ¿por qué no soñar?", agregó.
Nueva Zelanda estableció su récord en partidos jugados durante más de cinco años a partir de 1965, terminando con una derrota ante Sudáfrica, en Pretoria, en julio de 1970.
Mientras, los Springboks lograron 17 victorias entre 1997 y 1998 antes de caer con Inglaterra en Twickenham.
Los campos de rugby abundan en Nueva Zelanda, pero en Lituania, que tiene sólo 1.650 jugadores registrados en una población de 3,3 millones, sigue siendo el más minoritario de los deportes.
"Nunca será como el baloncesto o el fútbol, pero las cosas están mejorando", dijo Misevicius.
"Hay un programa ahora para conseguir que los niños jueguen y seguir con los triunfos sólo puede ayudar", agregó.
Reuters
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