martes, 21 de julio de 2009

¡Tango campeón!






El equipo argentino Tango Beach Rugby se consagró campeón en el torneo 2009 de Lignano ante la atenta mirada de Any Paván, que charló mano a mano con su creador, Iván Merlo. ¡No te pierdas las fotos desde la playa!


¿Cómo nació Tango Beach Rugby?

Fue hace dos años con una iniciativa mía, gracias a la relación que tengo con la gente que organiza el torneo de Lignano y con la Liga Italiana de Beach Rugby. Se me ocurrió armar un seleccionado argentino con los jugadores que se desempeñan en Europa. La idea se consolidó y los organizadores de Lignano me propusieron participar el año pasado. Hubo gran aceptación y salimos cuartos. Se armó un grupo muy lindo de chicos que juegan a nivel profesional. Eso motivó que trabajemos de nuevo para ofrecerles una segunda temporada de beach rugby con la idea de mostrarle al rugby italiano los valores que tiene este deporte y los jugadores argentinos en el mundo. Así nació Tango Beach Rugby.

Imagino que en esta época hay dos problemas importantes para que participar: armar el equipo -ya que la mayoría de los argentinos están de vacaciones en el país- y encontrar un sponsor que pueda ayudar bancar la participación. ¿Esto es así?

Las dificultades son como sucede normalmente en nuestro deporte. Para participar se necesita una solvencia económica para darle a los chicos todo. Desde hoteles, comidas hasta los materiales para jugar. Además el hecho de que el rugby mundial esté en crisis dificulta más poder conseguir jugadores que quieran participar en esta época. Especialmente acá en Italia se complicó más por que muchos chicos que querían estar no lo pudieron hacer porque los clubes están en momentos difíciles y esto hizo que ellos volvieran antes de lo previsto a Italia. Así que no es para nada simple.

Aunque los nombres cambien año a año por estas razones, ¿lo importante es que se mantenga el espíritu de este equipo argentino?

Exacto, la idea de esto es transmitir lo que es ser un jugador argentino dentro de una cancha de rugby, ya sea en una playa, en un partido de VX o un torneo de seven. El jugador argentino tiene algo especial y tiene una capacidad de adaptarse a cualquier disciplina y demostrar que técnicamente tenemos una formación de base importante. Por eso el equipo se muestra competitivo y los chicos tienen un compromiso fuerte con el grupo. Esa es la retribución más linda al esfuerzo de organizar este torneo. Además para mí es lindo compartir cosas con chicos con los que he jugado -como Emiliano Mulieri o Diego Giannantonio- o con mi hermano, aunque sea en un partido de beach rugby.

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