jueves, 22 de enero de 2009
Daniel Hourcade
En la Entrevista FARGO, el DT Daniel Hourcade contó cómo le está yendo en el Rouen francés y reflexionó acerca del plan profesional de la UAR. “Está bien que se le pague a los jugadores, pero no va a servir de nada si no se los pone a competir al máximo nivel”, dijo. Imperdible.
A mediados de 2008, el tucumano Daniel Hourcade, que fue técnico del seleccionado argentino de seven, se subió al avión y aterrizó en Francia, dejando atrás un exitoso proceso al lado de Tomaz Morais, DT de Portugal.
Para ser más específicos, el tucumano tiró el ancla en Rouen, un equipo de la Tercera División gala, que cuenta en su plantel con nueve argentinos, un uruguayo y un chileno. “Digamos que esta experiencia es bastante distinta a la que viví en Portugal. Este es un equipo profesional, y, allá, en Portugal, salvo en el seleccionado y cuando estuvimos para el Mundial de Francia, los equipos son amateurs. Así que el concepto es otro, porque éste es un país donde el rugby se vive, se siente, se respira, de otra forma muy distinta a lo que estaba acostumbrado”, explica el Huevo para comenzar la charla con Rugby Fun.
¿Y al Rouen cómo le está yendo?
Estamos bien; peleando para clasificar entre los cuatro primeros. Faltan cuatro partidos y nosotros, junto a otro equipo, estamos terceros. Además, tenemos a otro conjunto a sólo dos puntos, así que todo es muy parejo, muy disputado
Clasificarían al Pro D2, ¿no?
Sólo dos equipos clasifican al Pro D2, y pensá que estamos hablando de 48 conjuntos que pelean por este par de lugares… La verdad es que es muy difícil-.
¿Qué nivel hay en esta División?
Sinceramente, me sorprendí. Pensé que los equipos tenían menos nivel del que tienen. Todos los equipos cuentan con buenos jugadores, y hay un promedio de 15 extranjeros por plantel; muchos fijianos, tonganos, sudafricanos, samoanos… Todos son partidos muy duros, muy ásperos; no hay encuentros fáciles. La verdad, no me gusta mucho cómo se juega…
¿Por qué?
Hau mucha patada, mucha presión. Se busca más el error del rival que construir el juego. Todo los contrario a mi filosofía en cuanto al rugby.
¿Y cómo te estás adaptando a este tipo de planteos?
Y… hay que adaptarse al medio, no queda otra. Ahora cambiamos un poco la estrategia; la consigna es arriesgar menos y tratar de ser más eficaces. Igual mi equipo juega mucho, y eso le genera problemas a todos. El problema es que estábamos arriesgando demasiado en nuestro campo y los errores que cometíamos en ataque, lo pagábamos con puntos en contra.
Hasta cuándo tenés pensado quedarte allá?
No lo sé. Ahora tengo contrato hasta junio; después veremos. Hay algunas posibilidades que me ofrecieron y, una vez que finalice el campeonato, quiero analizarlas con calma y luego de un balance.
¿Propuestas de Francia o de la Argentina?
De allá y de acá…
¿Y no te tira volverte para acá?
Sí, seguro, me tira mucho, sobre todo para estar junto a mis afectos. Pero también sé que aquí están las mejores posibilidades profesionales… Es todo un tema.
Hablaste de profesionalismo, ¿qué opinión tenés del plan que está intentando impulsar la UAR?
Espero que se concrete de una vez por todas. No hay otra, hay que generar una mejor competencia para poder estar a la altura de las potencias. De no ser así, vamos a seguir dependiendo del esfuerzo individual de los jugadores. El gran problema es que en la Argentina sigue preponderando lo político por encima de todo…
¿Creés que lo que se está intentando lanzar es la manera indicada de llegar al máximo nivel?
Mirá, me parece bien que se le pague a los jugadores, pero ese dinero no va a servir de nada si no se los ponen a competir al máximo nivel. Pagarles para que jueguen contra seleccionados de cuartos orden es tirar la plata, porque ellos no van a poder aprender más de lo que ya saben. Te repito: hay que poner equipo argentinos a jugar contra otros que estén en el más alto nivel profesional. Sino, seguiremos con las misma falencias que tenemos en la actualidad.
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