La lucha intestina que desgasta al rugby argentino , pasa para nosotros por la marcada intransigencia de algunos grupúsculos que subsisten en el deporte a nivel nacional, mas cercano a viejas peleas entre unitarios y federales que a la realidad de hoy. Tenemos muy buen acceso a informaciones reservadas que demuestran los ingentes esfuerzos de muchos buenos dirigentes que se topan con cerrada oposición de unos pocos.
Donde uno quiera escuchar y sin que esta prelación signifique algo, se alaban las condiciones personales y dirigenciales de “Lalo Galán y de “Cacho Castillo , y no hemos encontrado en todo el país quien pueda endilgarle algún acto que no lleve directamente a la fuerte unión del rugby argentino.
Tanto el “tucumano” como el “platense” no reciben reparos de la gran mayoría, pero en esta sociedad conflictiva que nos toca vivir están los famosos trogloditas de antaño, ahora denominados talibanes , que destruyen lo que encuentran a mano. Dice el diccionario: “troglodita. Figurativo. Dícese del hombre bárbaro y tosco”.
Algunos fogonean la división por aquello de divide y reinarás .
Por lo que sabemos ambos piensan en forma muy similar sobre lo que hay que hacer a futuro en la UAR: profesionalización de los estamentos, todos y cada uno de los trabajos para llegar al Cuatro Naciones, inserción en torneos sudafricanos, fuerte desarrollo en todo el país en todas las areas, mayor competencia nacional, etc, etc. . Entonces uno se pregunta: porque no los dos?
Sabemos que la mayoría pretende una rotación de la cúpula de la UAR , que podría ser algo similar a aquel pacto de gobernabilidad vigente hasta el 2005, y cuyo cese fue para nosotros el mayor error de aquellos tiempos, más allá de lo que vino después.
Nos parece que teniendo dos hombres tan potables, honorables, trabajadores, serios, con pensamientos similares y superadores no se los debería desperdiciar y apuntar a lograr una política definida y sustentable que ambos pueden conducir con éxito.
”Lalo Galán” , preside su Unión de Buenos Aires en la actualidad y sería deseable que finalice su mandato en 2010, por lo exitoso de su gestión. ”Cacho Castillo”, es vicepresidente de la UAR, tiene una gran relación con todos y un gran trabajador.
La alternancia en la conducción de la UAR podría ser excelente y de una vez y para siempre se terminaría con esa triste división, Capital y Provincias.
Los dirigentes argentinos , tienen la palabra. No nos defrauden.
Desperdiciarlos sería un pecado mortal.
Foto: Castillo, Carreras, de izq. a der. (La Gaceta)
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